Este gran baño compate escena con el dormitorio y el vestidor, formando una zona íntima para disfrutar entre dos. El lavabo se concibe como un elegante tocador, mientras que la bañera es una prolongación de la cama. Sólo ducha y wc se cierran con una solución ingeniosa y un juego de tobiques procura corcuitos confortables.
La suite principal de esta casa en Sitges reúne dormitorio, baño y vestidor en una misma zona de noche. Los tres ambientes se organizan mediante un atractivo juego de volúmenes, con pocos tabiques que marcan los límites sutiles entre ellos. El proyecto destaca por sus ventanales y paredes acristaladas, que guían la ubicación de los principales elementos. Ante el muro de cristal se coloca en pararelo la cama de matrimonio, a los pies de la cual existe una pieza divisoria que separa conceptualmente estancias: la chimenea. Insertada en un bloque de obra, se encarga de poner límite al área de dormir con otro espaciode estar y lectura que lleva al vestidor. Éste último se encuentra tras el tabique que acoge al lavabo, un elemento concebido como un tocador para dos. Abierto en sus extremos, para poder llegar al vesridor y de él al baño con total flexibilidad, el muro que sí llega hasta el techo se ha pintado de un elegante tono tierra. En su cara que da al baño un largo bloque de granito negro compone el lavabo, con lavamanos inclinado practicado en la misma piedra y encimera que encierra un cajón con distribuidor de madera y tapa de acero,donde guardar los enseres y productos de aseo y belleza cotidianos. Acaban por componer el área de lavabo dos griferías tubulares instaladas a pared, un espejo rectangular que va de extremo a extremo y unos apliques y lamparitas de suspensión que iluminan corectamente este plano. Una silla-butaca se coloca opcionalmente delante de este plano para reforzar la imagen de tocador con cabida para los dos miembros de la pareja. En paralelo, una bañera de hidromasaje se inserta en un bloque revestido con los mismos listones de madera que el parquet del pavimiento, pareciendo que emerge del suelo y aprvechando su estructura para contar con prácticos cajones donde guardar toallas y productos de higiene. A los pies de ésta, unas mamparas de cristal opaco color fumé y serigrafiados encierran wc por un lado y ducha, por el otro. Son las únicas zonas que se ¨cierran¨ de un modo especial, para tener privacidad. En sus puertas de acceso se han serigrafiado las figuras típicas para señalizar aseo femenino o masculino, pero esta vez los símbolos se cogen de la mano para ocultar mejor los interiores con gracia, relacionando los dos cuartos. En el primero, el conjunto de inodoro y bidé se instala en suspensión, ocultando la cisterna en el murete de obra, que conlleva un estante donde colocar toallas, papel higiénico u otros elementos decorativos. Aquí también se encuentra una ventana, esta vez en vidrio traslúcido, que sique la ristra que viene de la parte superior de la bañera. En el espacio contiguo se encuentra la amplia ducha, con sistema de teladucha, plafón cenital con efecto lluvia y jets para hidromasaje vertical. Ambos cuartos, con puertas correderas, se distinguen del resto del ambiente porque se han revestido con grandes baldosas de resistente pizarra. Saliendo de la ducha y entrando por el hueco que deja el muro del lavabo, se accede al vestidor; una sala sobria, con muebles contrachapados en laca color negro, acabado seda mate e interiores en roble tanganike.Una gran isla central con módulos inferiores para el almacenaje organiza el ambiente a su alrededor, con armarios empotrados recorriendo las paredes, quedando totalmente integrados por la estética de sus frontales neutros. Los materiales utilizados ayudan a transmitir una atmósfera sosegada y elegante, intemporal y muy luminosa. La madera se une al granito negro, la porcelana sanitaria y el cristal en un mix natural, pensando para su resistencia al paso del tiempo, tanto en su sentido funcional como estético. Dichas materiales en contraste provocan armonía, algo crucial cuando distintas áreas comparten espacio.
martes, 27 de abril de 2010
Armonía para dos
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